Chiquita como un biscuit
es la princesa que amo yo,
blanca, graciosa y gentil,
es la imagen fiel
del más puro amor.
Chiquita, tú eres mi embeleso.
La dulce enamorada
que soñé un día,
cuando la fiebre del amor
que en mí nacía
me hizo ver,
los encantos de una mujer.
Chiquita, podrá su luz bella
la aurora risueña perder,
tu amor siempre en mi pecho
brillará como una estrella…
¡Tan inmenso es mi querer!